La conceptualización tectónica y esterotómica en el proceso de diseño arquitectónico de un espacio, contempla la noción de los arquetipos de cueva y la cabaña primitiva como conceptos sobre los cuales se establece relaciones o negaciones con el entorno así como del usuario a través de aspectos sensoriales y visuales. El primero, la cueva, se enfoca en la espacialidad interior y solo a través de ciertas aberturas puntuales se genera una conexión con el exterior, la materia es un todo, el cual contempla la idea de un muro continuo que engloba el espacio. El segundo, la cabaña primitiva, genera una relación directa con el entorno, en donde la ausencia del muro genera una continuidad de la naturaleza en el espacio interior, se crea un vínculo directo y específico con el contexto en el cual se ubica.